En un contexto global cada vez más alarmante, en los últimos tres meses el país vivió el mayor aumento de temperatura de la región.

Argentina fue el país sudamericano que sufrió más anomalías de temperatura. Durante los últimos tres meses, según un informe de Climate Central -una organización independiente-, se constató un aumento de casi 1°C por encima del promedio de los últimos 30 años (1991-2020), un desfasaje que lo ubica por encima del resto de las naciones de la región.
Esto sucede en un contexto alarmante: el año pasado fue declarado el más caliente registrado desde hace 175 años en el planeta. Así lo reveló la Organización Meteorológica Mundial (WMO, por sus siglas en inglés) en su informe anual, cuyos datos reafirman la crisis climática global.
El informe de Climate Central destaca también que, en conjunto con Chile, el país es el que más padeció días de riesgo por calor en la región. Fueron 40 los contados por esta organización, de los que 18 están vinculados al cambio climático. La ciudad más afectada fue la capital de Córdoba, que tuvo un aumento de temperatura inusual de 1,2°C y 22 días de riesgo por calor. Buenos Aires fue la segunda urbe con mayor aumento de temperatura (0,7°C más), seguida por Rosario (0,6°C más).

Las primeras dos ciudades argentinas figuran en el top 10 (puestos primero y décimo) de las que sufrieron mayor aumento de temperatura en todo América del Sur. Esto supone riesgos para la salud pública, la infraestructura y las economías regionales.
Según expone esta organización, el cambio climático es el principal factor que agudizó estas temperaturas extremas, y advierte que su motor central está vinculado al aumento de gases de efecto invernadero emitidos por las actividades humanas. Pero el calor es solo uno de los efectos profundizados por el cambio climático. El reporte global de la WMO indica que el año pasado ocurrieron una multiplicidad de fenómenos que cada vez son más agudos.