“Al rescate”: de Piamonte al Hospital Iturraspe

Así se define un grupo de mujeres de Piamonte que, con retazos de tela y lana, confeccionan ropa de cama para bebés. Reelaboran y envían al centro de salud ubicado en la capital provincial, donde se entrega a familias de bajos recursos.
Personal del Iturraspe con con las prendas confeccionadas.

¿Qué hacer con el tiempo libre cuando te jubilás? A ese enigma ya lo descifraron hace años un grupo de mujeres de Piamonte, a las que se sumaron chicas más jóvenes, pero que también quieren colaborar. ¿Qué hacen? Confeccionan mantas, cobertores y frazadas para los bebés ─cuyas familias no tienen suficientes recursos─ que van a nacer en el Hospital Iturraspe, de Santa Fe

“Todas cumplen una función en el grupo: golpean puertas para pedir; desarman prendas, por ejemplo las polleras que ya no se usan; destejen prendas de punto, lavan y planchan y dejan los retazos en condiciones de ser reutilizados”, comentaron, y agregaron un llamativo detalle: “El grupo tiene además una señora que ‘desenreda’ ovillos imposibles, rescata el hilado y ovilla nuevamente”.

Personal del Hospital junto a las cajas con mantas y frazadas.

Para la confección, el grupo recibe donaciones de vestimenta y retazos de tela, pero que está en condiciones de ser reutilizada. “Se confeccionaron muchas mantitas de bebés, cobertores de mayor tamaño y hasta frazadas”, detallaron las mujeres, y continuaron: “Las prendas que están en buen estado se envían así como las recibimos”. Por este motivo, llegaron también al hospital de la capital santafesina, ropa de bebé y niños, además de ropa de cama. 

“Tenemos en el grupo tejedoras especializadas en mantitas tejidas y una tejedora de chalequitos, es decir, los panceritos, y confecciona más de 50 prendas por año”, celebraron. Además, a este grupo también se sumaron algunas residentes del Hogar de Ancianos Don Carlos. Ellas tejen cuadrados de lana que luego, en Cáritas unen para lograr el armado de frazadas. 

“También hay una costurera que se especializa en prendas de niños y niñas pequeñas, realizados con retazos, con los que arma calzas y remeras”, señalaron. 

Las mujeres están en permanente contacto con el personal del Hospital Iturraspe, desde donde le indican cuáles son las necesidades. Desde hace dos o tres años, dicen, están requiriendo ropa de varón y abrigos. Algo que les resulta más complicado de conseguir, mientras que las de mujer son las que más reciben. 

“Todo lo que se envía no le quita al pueblo, porque consideramos que acá sobra y así podemos ayudar a nuestros hermanos más necesitados”, reflexionaron, y siguieron: “El Hospital Iturraspe varias veces recibió y recibe enfermos de la localidad”. 

En cuanto a los envíos, las mujeres resaltaron la ayuda que siempre reciben de la Comuna de Piamonte ya que abonan el costo de los envíos, “tanto en esta gestión como en la anterior”, aseguraron. “Queremos destacar la buena disposición y el apoyo de Aníbal, el comisionista que lleva las bolsas”, agradecieron. 

“Como católicas nos hacemos eco y obramos en consonancia con el Papa Francisco que pide en su encíclica Laudato Sí el amor efectivo a nuestros hermanos, el prójimo próximo y el cuidado de la Tierra, nuestra casa común”, reflexionaron. A propósito de esto, las mujeres buscan “rescatar” esas prendas “olvidadas en un ropero o que son de familiares difuntos” para reutilizarlas y generar nuevos usos. 

“Es poco lo que hacemos pero si en todas las poblaciones se copiara este trabajo se desarrollaría una conciencia universal que hará posible un mundo más humano. No se nos pide lo extraordinario, sino lo posible. Y todo es posible”, finalizaron. 

Los agradecimientos siempre llegan 

Las mujeres, comentaron que vía Whatsapp desde el Hospital les envían fotos con la ropa confeccionada, además de audios que “son alabanzas increíbles”. También, destacaron el trabajo conjunto con Cáritas, cuya directora es Valeria Lesta, y del presbítero Leandro Orellano, quien las acompaña en esta misión. 

Dejá una respuesta

Scroll al inicio